Jorge Cardelli - Dirigente de la Corr. Nac. Emancipación Sur
La ofensiva imperialista y neoliberal de Macri
Desde el triunfo del macrismo a través de Cambiemos en nuestro país se ha reactualizado una contraofensiva de carácter neoliberal sostenida desde los EEUU y sus aliados imperialistas de Europa. En el plano geopolítico esta ofensiva es parte del accionar imperialista norteamericano en el continente, buscando recuperar posiciones políticas y económicas de las que había retrocedido producto de alianzas de países latinoamericanos con los llamados “capitalismos emergentes”, a través de acuerdos políticos beneficiosos y de concesiones generosas a los capitales de esos países. El avance de China (la mayor preocupación norteamericana por su proyección imperial) en nuestro país y en Brasil ha sido importante. China logro hasta instalar una base militar en Neuquén. Esto explica la neutralidad cómplice de los EEUU con el “golpe institucional” de Brasil (dijo que no había habido golpe de estado, que el desplazamiento de Dilma fue a través de los carriles institucionales) o la feroz ofensiva contra Venezuela para quedarse con el control de su petróleo.
En el plano interno, el primer y más claro gesto de subordinación al capital financiero imperialista (predominio norteamericano), fue el pago a los fondos buitres con el aval de la mayoría de la clase política. Este final es el escalón anunciado de la estrategia afín al capital financiero del Kirchnerismo, que se negó a investigar el carácter fraudulento de la deuda hasta en los momentos de mayor poder político de su gobierno y llegaron a ufanarse de ser “pagadores seriales”. La consecuencia del pago a los fondos buitres es el aumento del endeudamiento externo por alrededor de 30000 millones de dólares entre Nación y Provincias.
El otro gran gesto de subordinación al modelo de dependencia del imperialismo fue la brutal devaluación del dólar, lo que implico una transferencia de ingresos a los exportadores en los primeros cinco meses del año de unos 4700 millones de dólares, más la quita de las retenciones a las exportaciones, que en el mismo periodo significan otros 700 millones de dólares, llevando de esta manera a manos del capital exportador alrededor 5500 miles de millones de dólares, que seguramente pasaran a integrar los circuitos internacionales de inversión. Nada indica que nuestro país sea el elegido inexorable para la reinversión de estos fondos, mas allá de que sea su lugar de origen.
Una consecuencia inmediata de estas primeras medidas adoptadas por el gobierno macrista es el aumento de los compromisos externos del estado y a su vez la baja de ingresos fiscales al mismo, lo que busca compensar con la eliminación de subsidios a los servicios públicos, el mantenimiento de altos impuestos a un importantes sector de los trabajadores, a las pymes y con los despidos en el estado. Es claro que este desequilibrio fiscal es producto de una brutal transferencia de ingresos a las clases dominantes locales y al capital imperialista. Pero a estas transferencias de ingresos a las clases dominantes hay que agregarle unos 7800 millones de dólares más en los primeros cuatro meses del año, producto del negocio del dólar futuro y de las altas tasas de interés pagadas por el Banco Central a los Bancos locales que invierten en colocaciones financieras emitidas por el mismo. Dos enormes transferencias de ingresos al capital financiero.
El tercer hecho, que como sabemos forma parte del sentido común neoliberal, es el salvaje ajuste desatado sobre las espaldas de los trabajadores. Inflación creciente, tarifazos y una altísima tasa de interés fueron las herramientas centrales. Con el tarifazo suspendieron los subsidios al capital de las empresas de servicios públicos. Paradójicamente nunca se auditaron las inversiones prometidas -aunque recibieron algunos aumentos o asistencias económicas en efectivo con anterioridad- ni se verificaron la razonabilidad ni la veracidad de sus costos. A partir de ahora, las ganancias empresarias serán consecuencia directa de lo que pague el pueblo usuario. Es importante aclarar que estos capitales son monopólicos y fuertemente extranjerizados. La resistencia popular le ha ido empantanando la gestión del aumento y ha provocado que un juez federal suspenda la aplicación del mismo en todo el país. Esta resistencia ha producido un importante cacerolazo en buena parte del país, donde jugaron un papel protagónico las organizaciones de consumidores. La presión popular lo obligó al gobierno a ponerle un tope del 400% a los aumentos. Esto sigue siendo muy alto y la protesta ha continuado creciendo. La Cámara Federal de la Plata suspendió los aumentos en todo el país y el gobierno está buscando el auxilio de la Corte para que le legitime el tarifazo.
Dijeron que el objetivo de la decena de miles de despidos del estado era la baja del déficit fiscal, además de echar a la “grasa militante”, pero en los hechos la resistencia popular también le ha puesto algunos límites en el plano nacional y en algunas provincias. Se han conseguido algunos aumentos por vía de paritarias nacionales pero en muchas provincias la pelea continua siendo muy dura. En Tierra del Fuego la represión ha sido salvaje, al mejor estilo de la Dictadura. El gobierno de Jujuy se va sacando la careta en cuanto a que es un fiel representante de los Blaquier. Reprimió brutalmente a los trabajadores del Ingenio Ledesma con un saldo de más de 80 heridos. Volviendo al tema del déficit fiscal, el hecho de haber tenido que dar respuesta a algunas exigencias populares, los lleva a que sea igual al del kirchnerismo. Es claro que los despidos son el camino que les permite ir reordenando el estado con un claro sentido neoliberal y que en algunas áreas implicó el agrandamiento de la planta de trabajadores. Además el despido cumple la función de amedrentamiento y por ese camino da vía libre a las formas más autoritarias de gestión tanto en lo privado como en lo público.
Los despidos en los sectores privados provinieron de la recesión creciente que fueron desatando. En Mayo se perdieron alrededor 40000 puestos de trabajo según Clarín que es amigo del gobierno. Siguieron receta clásica de enfriar la economía para bajar la inflación. Aquí es donde la baja del consumo, las altas tasas de interés, la alta inflación y el tarifazo fueron los factores que hicieron el trabajo recesivo. Con altos niveles de precarización los únicos limites que tuvieron los capitalistas para despedir fue la resistencia de los trabadores. El saldo de toda esta política es que la inflación no baja como consecuencia de la presión exportadora y del alto grado de monopolio de la economía. Para este año es de más del 40% con el consecuente deterioro salarial y un millón y medio más de pobres. Las políticas de ajuste siempre aparecen con una zanahoria de premio. En este caso es la ilusoria baja de la inflación y la reactivación para el segundo semestre. Este sueño va quedando en el camino ya que todos ya que los analistas afines establishment postergan estos objetivos para el año que viene. Pero si este oasis reactivador y de baja de la inflación existiera, estará muy lejos de alcanzar para reparar el inmenso daño hecho a nuestra nación, producto de la menor capacidad de compra de nuestros salarios y una mayor precarización. Esta realidad ha gestado no solo un enorme deterioro salarial o un incremento de la pobreza, no olvidemos que la heredada ya era grande, sino también es otra vuelta de tuerca en la destrucción de la producción nacional existente. Esta última situación se ve agravada por el creciente incremento de la importación de productos terminados. Un ejemplo es la industria del calzado donde las ventas han caído alrededor del 22% y las importaciones han aumentado alrededor de un 42% en el último año. Más de dos millones de unidades en los primeros 5 meses del año. En la provincia de Misiones se está sintiendo con fuerza creciente la importación de madera bajando la actividad de los aserraderos de la provincia.
La realidad es que la política de ajuste de Macri es el preámbulo de un intento de reactualización del neoliberalismo ya vivido en el menemismo, pero realizado de manera más negociada, más flexible y con una pretensión de mayor inversión extranjera con una proyección industrializadora, exportadora y generadora de puestos de trabajo. El estado continúa siendo el principal empleador y las dificultades de financiamiento crecen. El déficit fiscal continua ingobernable y sin duda es un factor generador de inflación. Es claro que quieren avanzar en la privatización de por lo menos algunas partes del sistema jubilatorio, por ejemplo con el Fondo de Sustentabilidad, acabar con las moratorias en el mismo (como si los que se jubilan vía moratorias no fueran en su mayoría trabajadores) o también aumentar la edad jubilatoria. Tienen en vista una reforma laboral más precarizadora que la actual. Quieren continuar con la política de privatización extendiéndola a la gestión de otras áreas del estado. En el proyecto neoliberal macrista los objetivos de convertir al estado en un aparato atravesado por el capital imperialista e intermediario afín a la dependencia, mas allá de algunos sobresaltos, continúan intactos.
La realidad es que la economía del país está en crisis, no da respuesta a las necesidades básicas populares. Este es el combustible de las pequeñas rebeliones populares cuyo desarrollo preocupa. Esto ya viene de los últimos años del gobierno kirchnerista y continua profundizándose. El kirchnerismo no salió de la economía primarizada, no industrializo y no gesto fuentes de trabajo genuino. Esto es parte de sus fracasos y debería ser eje uno de los ejes de su autocrítica. El plan de salida de la crisis de Macri es de reubicación internacional de nuestro país en onda norteamericana y europea. Un mayor desarrollo industrial vía una fuerte inversión extranjera. Lo que no dice pero lo sabe que esto es a costo de un brutal ajuste y un mayor endeudamiento para salvar la coyuntura. Esto, creo, es un imposible. La resistencia popular va a ser importante.
En educación hay varios mensajes de Bulrich y del coro de intelectuales que lo acompañan, buscando emular, aunque de manera más negociada, las orientaciones actuales del Banco Mundial y que hoy se llevan a rajatablas en México. A través de la evaluación de los docentes buscan debilitar su fuerza y así imponer un modelo de escuela más autoritaria. El modelo ideológico-pedagógico que los inspira es el de la escuela privada, donde el director tiene autoridad absoluta y donde el valor fundamental es el “mérito” individual. La escuela debe ser una primera experiencia ideológica y cultural de un modelo de sociedad vertical y autoritaria y donde los que la dirigen son los que tienen más méritos ideológicos. Seguramente la reacción de los docentes y de las expresiones de la educación popular será importante, pero eso no implica que retrocedan en sus objetivos de hacer una sociedad altamente despolitizada y donde la subordinación ideológica a los que mandan, sea el valor principal y que el modelo de referencia institucional-político sea la empresa.
El objetivo que más claro se visualiza es que ratifican y profundizan la línea de precarización laboral del gobierno anterior, buscando tener una gran mayoría de la población tercearizada o en negro y con bajos salarios y de esa manera crear condiciones de seguridad social y política para una inversión extranjera con mayor proyección industrial y generadora de puestos de trabajo. Esto se acopla con algunos lineamientos en el plano político internacional como decíamos más arriba. Hay bastantes señales de que quieren avanzar en la liberación de mercados y no estar atados a compromisos con el MERCOSUR u otra instancia de corte más latinoamericano. Están avanzando a incorporarse en el TPP y a promover acuerdos de libre comercio de un MERCOSUR debilitado con Europa. Aspiran a una línea exportadora que incluya más productos industriales producidos por la inversión extranjera. Pero todas estas aspiraciones tienen como condición necesaria que la economía del crezca en los marcos de la gobernabilidad de los trabajadores y los sectores populares. Completando en el plano internacional la alianza con los EEUU avanza al punto que aparecen como fuerza de choque para debilitar el UNASUR y revitalizar la OEA, debilitar o impedir el desarrollo del CELAC y por supuesto, en esto siguen al kirchnerismo y a la política petista de Brasil, mandar a cuarteles de invierno al Banco del Sur. Es claro que son soldados del golpe de estado contra Maduro en Venezuela y por hoy ignoran a Bolivia porque no les da el cuero. Lo de Evo Morales todavía viene con fortaleza. Pero hay algo que no van a poder impedir: el ideario latinoamericanista de Hugo Chaves tiene bases populares que se entronca con las grandes tradiciones nacionales y latinoamericanas como las del peronismo, las de Cuba y las luchas indígenas de Bolivia hoy expresadas por el gobierno de Evo morales. Este debate ideológico profundo en el Movimiento Popular, Nacional y de Nuestra América es indetenible como lo será nuestra liberación nacional y social.
Para completar esta breve descripción del proyecto neoliberal del macrismo en ciernes hay que señalar que se están produciendo modificaciones en la gestión del estado donde toman fuerza los modelos empresariales y desaparecen los mecanismos de control que puedan afectar los movimientos de los capitales monopólicos imperialistas o pseudo nacionales. A esto hay que agregar los nuevos ingresos en la Corte Suprema, Rosatti y Rosenkrantz, cuyos antecedentes se caracterizan por sus posiciones claramente restrictivas al derecho de huelga y otros derechos de los trabajadores.
Por último es importante señalar que en este momento la hegemonía en la dirección del estado, en tanto expresión de poder de las clases dominantes, clases que articulan la dominación imperialista, ha adquirido un importante peso el capital imperialista, en particular los de origen norteamericano y europeo. Vuelve a rearticularse la alianza de estos con los terratenientes y con el agronegocio. No olvidemos que esta oligarquía fue aliada del gobierno anterior hasta el 2008. La rebelión agraria marco el inicio de la ruptura de la alianza que se terminò de concretar con la oposición política abierta, cuyo triunfo político es el Gobierno de Macri. Es importante no perder de vista que la oligarquía terrateniente es un sector estratégico al interior de las clases dominantes y además sumamente pragmático. Su alianza con el kirchnerismo y su proyecto de articulación con los capitalismos emergentes expresados en los BRICS lo muestra.
La resistencia al ajuste
Ante semejante ofensiva neoliberal y pro-imperialista la resistencia popular comenzó con infinidad de matices. La defensa de los puestos de trabajo ha sido inmensa, tanto en el estado como en los privados. En el caso del estado es necesario destacar el esfuerzo realizado por los trabajadores del estado, docentes, judiciales, de la salud, estudiantes universitarios en las diferentes provincias del país como en el Estado Nacional. En el plano de los privados la lucha implicó paros, tomas de fábrica, cortes de rutas y movilizaciones. La lucha por el salario, sea en paritarias o no, ha implicado el desarrollo de paros y movilizaciones. Docentes de todos los niveles, aceiteros, judiciales, trabajadores de la salud, bancarios, de la energía, camioneros y otros en muchos casos consiguieron importantes aumentos salariales, pero no recuperaron el deterioro del mismo producto de la brutal inflación de la primera mitad del año. En muchas provincias estas luchas continúan como es el caso heroico de la docencia santiagueña ante un gobierno de origen radical, que jugó con el kirchnerismo y que es un autoritarismo salvaje. En el plano provincial hay conflictos donde la represión gubernamental ha alcanzado niveles propios de una Dictadura militar. Es el caso de Tierra del Fuego. Con características fuertemente represivas también están las provincias de Santa Cruz y Chaco, donde los estatales motorizados por los docentes luchan por evitar que se profundice el deterioro salarial. Es necesario resaltar que en estas provincias gobiernan el justicialismo, algunos fuertemente kirchneristas como el Chaco y Santa Cruz
La CTA Autónoma ha acompañado y acompaña todas estas luchas tomándolas como propias y haciéndose presente cada vez que es necesario y posible, interviniendo en los conflictos y poniendo su peso institucional en la relación con los gobiernos. En algunos casos esto ha sido determinante para abrir una mesa de negociaciones como es el caso de Jujuy, tras lo cual se reincorporaron más de 700 trabajadores o una incipiente posibilidad de negociación en el conflicto de Tierra del Fuego.
Este protagonismo de la CTA Autónoma se ha realizado en los marcos de la política gremial de unidad en la acción avalada por la mayoría de los compañeros en su práctica concreta en las luchas provinciales. Una pequeña victoria de esta política fue el voto mayoritario en el Congreso Nacional de la ley antidespidos y que Macri se vio obligado a vetar. La respuesta a este veto fue la masiva movilización de los trabajadores el 2 de Junio. En este plano, en el de las movilizaciones, señalamos la Marcha del 24 Febrero a Plaza de Mayo con el protagonismo de la CTA A y de la CTA de los Trabajadores y de las fuerzas políticas de izquierda, la multitudinaria marcha universitaria – con la unidad de todo el arco político docente y estudiantil- del 12 de mayo con el Ministro Bulrich, el histórico paro del 29 de Abril donde más de 300000 trabajadores ganaron la calle con la presencia de la CTA A y las otras centrales obreras. Hay que destacar que ese paro fue determinante para que salga del Congreso la Ley Antidespidos, que obligo al presidente Macri a hacer uso de la herramienta constitucional veto. Actitud antidemocrática ya que no se bancó la derrota parlamentaria ante una ley limitada y de alcances acotados. Finalmente queremos destacar la Jornada Nacional de Lucha del 2 de Junio con una movilización multitudinaria hacia la Plaza de Mayo. Aquí es importante señalar que esta jornada es una muestra importante de la potencialidad de la incipiente e ineludible unidad de acción. De esa movilización participaron además de la Multisectorial que históricamente vino articulando con la CTA Autónoma, la seccional de ferroviarios que conduce el Pollo Sobrero, la Federación de Aceiteros, la nueva conducción del SUTNA, La Bancaria, la CTA de los Trabajadores, otros movimientos sociales y las fuerzas de izquierda. Es un camino parecido al de la unidad de acción que se llevan en la mayoría de las provincias. Los ejemplos más claros son los de Tierra del Fuego -más allá de la defección de algunos estatales-, de Santa Cruz, del Chaco, Misiones, Jujuy y otros. En muchas provincias es necesario destacar el papel protagónico de los docentes, encabezados por los sindicatos de base de la FND.
En estos días la lucha contra el tarifazo ha alcanzado su punto más alto. El cacerolazo del Jueves 14 se sintió con fuerza en las ciudades más importantes del país. En este caso, a la hora de analizar la convocatoria y organización de esta lucha, hay que combinar cierta voluntad espontanea con la actitud militante de las organizaciones de consumidores junto a fuerzas y partidos políticos de izquierda o centro-izquierda y a organizaciones gremiales de trabajadores. En este frente todavía poco orgánico de lucha también estuvo presente la CTA Autónoma a través de los frazadasos y del protagonismo de sus dirigentes. El kirchnerismo tuvo una participación activa pero, por lo menos en la Ciudad de Buenos Aires, se cuido de hacerse visible con el “volveremos”. El gobierno ha recibido un golpe importante con el fallo de la Cámara Federal de la Plata que suspende en todo el país los aumentos de tarifas en el gas y ante esto está tratando de involucrar a la Corte. La oposición vergonzante de Massa y otros va tomando más cuerpo y es de esperar que crezca a medida que nos acerquemos al 2017, año de elecciones. Este frente de lucha del tarifazo ha adquirido un volumen inesperado para el gobierno pero también para la oposición formal. Se habían confiado demasiado en el “discurso anestesiante” de la corrupción kirchnerista. Todo indica que si el gobierno no busca una forma elegante de retroceder la movilización va a continuar y el costo político va a seguir creciendo.
Para terminar esta descripción muy general de la respuesta popular la ofensiva imperialista y neoliberal de Macri es importante enfatizar que la acción combinada del tarifazo, las altas tasas de interés, la apertura de las importaciones y la baja del consumo por la alta inflación está bloqueando la reactivación y lo que es más grave, está golpeando a la industria nacional. Ya lo dijimos más arriba, están avanzando los importados de productos terminados que tradicionalmente se fabricaban en Argentina. Este es un frente de lucha que ira convirtiéndose en otro polo de oposición al gobierno de Macri. Este frente converge con la lucha contra los despidos que continúan aunque no de la manera masiva de los primeros meses del año.
Como observación mas general creo que se puede señalar que indudablemente ha habido y hay resistencia a la embestida imperialista, pronorteamericana y neoliberal de Macri pero muestra una importante desarticulación interna. Por un lado la CGT ha decidido no confrontar abiertamente con Macri. Va negociando de manera combinada el conflicto con los fondos de las obras sociales. Vienen postergando lo del paro general y en el tema de las tarifas han hecho una oposición de carácter formal. Es indudable que están sintiendo la presión de los trabajadores ante la recesión, que amenaza con continuar con el segundo semestre y seguro que ello los empujara a la movilización, inclusive al paro general. Es claro que no tenemos que esperar que ellos encabecen la lucha contra el macrismo. Pero si podemos empujarlos a que estén a la altura de la circunstancias en la medida que la presión de los trabajadores crece. Desde este punto de vista para el Movimiento Popular es central denunciar las características de la ofensiva neoliberal e imperial del macrismo y avanzar, en el caso de los trabajadores, en la generación de una articulación sindical orgánica, autónoma y democrática, comprometida con las históricas luchas obreras y con un programa reivindicativo-político. Una instancia político-sindical que sea capaz de dar batalla política ideológica, en los marcos de los objetivos de unidad de los trabajadores, a la dirigencia sindical negociadora, que siempre se inspira ideológicamente en el Vandorismo. Es claro que la CTA autónoma, con sus antecedentes conceptuales y prácticos en la lucha contra el unicato sindical como en el desarrollo de una instancia institucional democratizadora, como otras organizaciones sindicales nacionales que están dando batalla en el terreno concreto contra el neoliberalismo pronorteamericano macrista, en esto incluyo a la CTA de los trabajadores u organizaciones sindicales afines a la izquierda o que han tenido acercamientos con el kirchnerismo, deben ser parte de la partida.
Es claro que estamos ante una transformación de la situación. Un ofensiva neoliberal reactuallizada y una crisis importantes del Movimiento Popular y Nacional.
Jorge Cardelli
Dirigente de la Corr. Nac. Emancipación Sur