Nuestra realidad reiterada y sistem谩ticamente se ve bombardeada por noticias que hacen referencia a la libertad. Libertad que es presentada como a fuente de todos los bienes.
En estos d铆as, todo el sistema comunicacional celebra con alborozo un acuerdo de Libre Comercio del Mercosur con la Comunidad Econ贸mica Europea.
Nadie conoce los t茅rminos del acuerdo, pero igual se festeja. Si es libre no puede ser malo.
Ya, en oportunidades anteriores he escrito sobre el Libre Comercio. Como la inmensa mayor铆a habla de la cuesti贸n y no tienen ni idea de qu茅 se trata, asumen que lo que plantean los poderosos ser谩 para el bienestar de los Pueblos.
Lo que se ha dado en llamar Libre Comercio, se basa en una teor铆a desarrollada por David Ricardo en los albores del capitalismo moderno desde Inglaterra.
Y como afirm贸 John Kenneth Galbraith, lo que se asume como leyes, en la econom铆a no lo son, sino que son actos segundos para justificar la dominaci贸n. Primero adquiero la posici贸n dominante y luego desarrollo el presento fundamento te贸rico que justifique tal dominaci贸n.
Y en esto es tan as铆, que toda la banda de presuntos economistas que pululan a diario por nuestros medios de comunicaci贸n, jam谩s al respecto de este tema van a se帽alar que, para que se cumpliere el modelo te贸rico debe verificarse la libre circulaci贸n de los factores de producci贸n.
Es tan as铆 esto, que en la actualidad, en la cuesti贸n del BREXIT, esto es el retiro de Gran Breta帽a de la Comunidad Econ贸mica Europea, Alemania y Francia, los dos principales pa铆ses de lla Comunidad, contestaron a las pretensiones brit谩nicas con las siguientes palabras:
El mercado 煤nico es un instrumento de integraci贸n econ贸mica de la Uni贸n Europea. Consiste en el establecer un mercado com煤n entre los estados miembros que permite la libre circulaci贸n de bienes, servicios, capitales y personas y, en su interior, los ciudadanos de la Uni贸n pueden vivir, trabajar, estudiar o hacer negocios con libertad. | Fuente: Colourbox 鈥 Publicado en el Diario Clar铆n
Es digno de leer el final de la frase, los ciudadanos de la Uni贸n pueden vivir, trabajar, estudiar o hacer negocios con libertad.
Acaso alg煤n argentino, en un delirio importante, 驴podr谩 so帽ar que tocar谩 las puertas de Par铆s y con peor delirio exigir谩 los mismos derechos que los comunitarios?
En historia de los tratados de Libre Comercio, exceptuando a la CCE, jam谩s se ha contemplado la libre circulaci贸n de la mano de obra, del trabajo.
El ejemplo m谩s concreto y cercano es el NAFTA, la sigla en ingl茅s del Tratado de libre Comercio de Am茅rica del Norte, donde nunca fue contemplada la libre circulaci贸n de los trabajadores, sino que adem谩s jam谩s se avanz贸 en la cuesti贸n del derecho del trabajo. Conclusi贸n a igual trabajo un trabajador estadounidense cobra de 5 a 7 veces lo que cobra un trabajador mejicano.
Y para que no quepan dudas, si no bastaba el R铆o Grande los yanquis exigen construir un muro, donde el muro de Berl铆n quede como una parecita.
Por ello reitero, el Libre Comercio no existe. Los tratados que as铆 se denominen solo son para profundizar la dominaci贸n. La Argentina ya con una econom铆a reprimarizada, profundizar谩 el modelo. Lo que nadie dice es adonde ir谩n la mitad de los argentinos. Quiz谩s algunos, como ya lo aplaudieron anta帽o, piensen que el mar es buen destino.
A todos aquellos culturosos, que en su an谩lisis binario de la realidad aplauden toda noticia que venga del sistema, los invito, pero tambi茅n los desaf铆o a que abandonen la comodidad de las computadoras y aprendan con juicio cr铆tico. Todo tratado, acuerdo, que se base en un presunto Libre Comercio es para perjuicio de nuestro pa铆s y solo para beneficio de una peque帽a minor铆a. La Argentina ya vivi贸 esta experiencia. Los culturosos que tengan descendencia, sosteniendo posiciones dogm谩ticas, adhiriendo acr铆ticamente, est谩n condenando a sus hijos ya sus nietos.
Juan An铆bal Albaytero
Emancipaci贸n Sur